En el ámbito de la salud bucodental, abundan los consejos bien intencionados… pero no siempre correctos. Muchos de estos mitos se han transmitido de generación en generación y, aunque parezcan inofensivos, pueden afectar negativamente tu salud. Hoy desmentimos los 5 mitos más comunes sobre el cuidado dental, ya que nuestros pacientes a menudo nos los transmiten en la clínica y en DEOCARE nos parece importante comentarlos.
❌ Mito 1: Si no duele, no pasa nada
La mayoría de las enfermedades bucales, como las caries o la enfermedad de las encías, pueden avanzar sin causar dolor en las primeras etapas. Cuando sientes dolor, es posible que el problema ya esté avanzado. Las visitas regulares a la clínica, nos permiten detectar y tratar problemas antes de que se agraven.
❌ Mito 2: Cepillarse más fuerte limpia mejor
Cepillarte con demasiada fuerza o con un cepillo de cerdas duras puede desgastar el esmalte dental y dañar las encías. Lo importante es la técnica, no la fuerza. Usa un cepillo de cerdas suaves y realiza movimientos suaves y circulares durante al menos 2 minutos. Como en todo en la vida, el exceso nunca es bueno.
❌ Mito 3: El hilo dental no es necesario si me cepillo bien
El cepillo no puede alcanzar el 100% de las superficies de tus dientes, especialmente entre ellos. El hilo dental elimina la placa y los restos de comida en esas zonas difíciles, previniendo caries interdentales y enfermedades periodontales. ¡Cepillarse sin usar hilo dental es quedarse a medias!
❌ Mito 4: El blanqueamiento daña los dientes
Los tratamientos de blanqueamiento dental realizados en la clínica, son seguros y están formulados para proteger el esmalte. Los problemas aparecen cuando se usan productos caseros sin control. Te aconsejamos que si estás pensando en blanquear tus dientes, pases por DEOCARE para comentarlo y hacerlo de forma 100% segura.
❌ Mito 5: Los dientes de leche no necesitan cuidados especiales
Aunque los dientes de leche son temporales, cumplen funciones importantes durante la etapa de la infancia: ayudan a los niños a masticar, hablar correctamente (y evitar problemas de expresión oral) y guían el crecimiento de los dientes permanentes. Si no se cuidan, pueden causar dolor, infecciones y afectar el desarrollo dental futuro.
¿Alguno de estos mitos estaba arraigado en ti? Es hora de replanteártelo para cuidar adecuadamente de tu salud bucodental y la de tu familia. Y siempre, ante la duda, consúltanos, estaremos encantados/as de atenderte.